Cuando faltan pocas horas para que la República Bolivariana de Venezuela presente su posición ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) respecto a la defensa de sus derechos soberanos sobre la Guayana Esequiba, recordamos que el Estado venezolano se ha mantenido alerta ante el apetito extranjero, empeñado desde hace más de dos siglos en obtener los recursos que alberga la región.
En el año 1821 el Libertador en su condición de presidente de la República de Colombia obtuvo el reconocimiento británico de los límites territoriales de Venezuela, estableciéndose oficialmente la ribera izquierda del río Esequibo como la frontera venezolana con la entonces colonia del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Sin embargo, algunos colonos europeos en su afán por encontrar el codiciado Dorado iniciaron el proceso de usurpación de la Guayana Esequiba, un territorio cuyos títulos históricos y jurídicos demuestran que era, es y seguirá siendo parte de Venezuela. Dicha usurpación fue tristemente avalada en el año 1899 por un tribunal internacional corrompido.
En el año 1962 tras años de gestiones por parte del Estado venezolano, la demanda de Venezuela sobre la sentencia del Laudo Arbitral de París de 1899 fue admitida en la Organización de Naciones Unidas, conociéndose así los motivos por los cuales Venezuela considera dicho laudo como “Nulo e írrito”. Situación que condujo a las partes a realizar nuevas negociaciones que concluyeron de manera parcial con la firma del Acuerdo de Ginebra de 1966 que establece la creación de una Comisión Mixta para buscar una solución satisfactoria para el arreglo práctico de la controversia territorial, empleando los métodos de resolución pacífica de controversias expresados en el art 33 de la Carta de Naciones Unidas. Pero cuando está en juego la integridad territorial de un país y/o su soberanía sobre parte de él, esta tarea se hace cuesta arriba. Después de varias décadas sin llegar a una solución pacífica para dirimir la controversia, en medio de la crisis interna de Venezuela y el escaso apoyo internacional del país latinoamericano en la región, el gobierno de la República Cooperativa de Guayana, introdujo una demanda en la CIJ para hacer valer la sentencia del Laudo Arbitral de París de 1899.
Actualmente los venezolanos realizan grandes esfuerzos por preservar y defender los espacios geográficos de su país, y sin importar su actual ubicación, ni posición política, aborrecen la apetencia de gobiernos oportunistas que valiéndose de la coyuntura actual, conspiran con el capital extranjero para apropiarse de los recursos de la región. Mientras tanto la población de Venezuela y sus cuerpos militares mantienen presencia y ejercen soberanía a lo largo y ancho de sus espacios terrestres, fluviales, marítimos y aéreos, deseando borrar las rayas diagonales que impiden la completa apreciación del mapa de Venezuela en el extremo oriental de los estados Bolívar y Delta Amacuro.
Prof. Alexis Palencia Hernández
DEFENSA DE LA SOBERANIA NACIONAL EN LA FACHADA ATLÁNTICA DE VENEZUELA
El territorio venezolano se extiende hacia el Mar Caribe y el Océano Atlántico, áreas consideradas de interés vital para el tráfico marítimo internacional. Por esta razón el Estado venezolano mantiene jurisdicción y ejerce derechos soberanos sobre los espacios acuáticos que comprenden estas regiones en concordancia con lo establecido por el Derecho Internacional vigente, la Constitución de la República Bolivariana Venezuela y los Tratados de Límites Marinos y Submarinos suscritos con los Estados vecinos.
CRONOLOGÍA RECIENTE
1Ø de octubre de 2Ø13 el Patrullero Oceánico AB “YEKUANA” (PO-13) detectó e interceptó el Buque de Servicios e Investigación “RV TEKNIK PERDANA”, que se encontraba navegando en la Zona Económica Exclusiva de Venezuela.
Marzo de 2Ø15 Guyana anunció labores de exploración petrolera en las aguas del Bloque Stabroek por DEEPWATER CHAMPION de la compañía estadounidense Exxon Mobil.
26 de mayo de 2Ø15 fue promulgada la creación y activación de las Zonas de Defensa Integral Marítimas e Insulares (ZODIMAIN) por el Cddno. Nicolás Maduro Moros en Consejo de Ministros y publicado en la Gaceta Oficial Ordinaria N° 4Ø.669
22 de diciembre de 2Ø18 la Armada Bolivariana interceptó al buque de prospección sísmica RAMFORM TETHYS cuando realizaba estudios sísmicos en un sector del Bloque Stabroek, en nombre de la ExxonMobil.
Ø4 de enero de 2Ø19 los países que integran el llamado Grupo de Lima, desinformados sobre la controversia territorial entre Venezuela y Guyana, manifestaron su “profunda preocupación por la interceptación realizada el día 22 de diciembre de 2Ø18 de una nave de investigación sísmica, por parte de la marina venezolana dentro de la zona económica exclusiva de la República Cooperativa de Guyana". Como consecuencia de este pronunciamiento el Estado venezolano a través de su canciller Jorge Arreaza protestó tal afirmación y exhortó a los gobiernos de dichos países a retractarse, lo que hicieron a la brevedad, dejando en evidencia la maniobra usurpadora del gobierno de Guyana.
Ø7 de enero 2Ø21 el presidente Nicolás Maduro Moros, en Consejo de Defensa de la Nación, anunció el establecimiento del Territorio para el Desarrollo de la Fachada Atlántica de la República Bolivariana de Venezuela.
21 de enero de 2Ø21 dos buques pesqueros registrados en Guyana, identificados como Nady Nayera y Sea Wolf, fueron interceptados por la Armada Bolivariana por ejercer in fraganti pesca ilegal.
